Como preámbulo de esta celebración, durante esta semana en la Catedral de la Inmaculada se cumplió el rezo de la novena en honor a Santa Ana, patrona de Cuenca.
Este sábado 26 de julio, la Arquidiócesis de Cuenca invita a celebrar la fiesta litúrgica de Santa Ana, patrona de Cuenca. Será también la ocasión para ser parte del Jubileo de los Abuelitos y Ancianos. La celebración tendrá como evento principal la Eucaristía, que se celebrará en la Catedral de la Inmaculada Concepción, a las 09:00, la misma que será presidida por Monseñor Marcos Pérez, Arzobispo de Cuenca.
Esta será una buena oportunidad para para rendir un homenaje de gratitud a los abuelitos y adultos mayores que han acumulado numerosas experiencias durante su vida. Monseñor Marcos recordó que todos tenemos muchos motivos para expresar nuestro cariño y respeto a nuestros abuelitos, y una forma de hacerlo es elevando una oración a Dios, pidiendo por su salud y su vida.
Nuestra devoción verdadera a los santos debe traducirse en acciones muy concretas, en este caso, caridad cristiana con nuestros abuelitos que nos han dado su protección, cariño y cuidado. Una sociedad sana se nota cuando hay respeto y aprecio a las personas vulnerables como nuestros ancianos.
En este contexto, se han cursado invitaciones a varios párrocos, hogares de ancianos, centros que trabajan con adultos mayores y movimientos laicales para celebrar juntos esta festividad.
Sin olvidar que el centro de la celebración es la Eucaristía, se ha preparado para cerrar la jornada, un evento cultural en el Seminario San Luis. Se prevé la asistencia de alrededor de 400 adultos mayores. Habrá presentaciones de música, danza y teatro. Para el evento artístico se contará con la participación del coro juvenil de la Catedral de Cuenca y la Universidad del Adulto Mayor, la Fundación “Sírvase un Payaso” ofrecerá momentos de alegría a los presentes. La Banda de música de la Policía Nacional animará la bienvenida de los abuelitos y ancianos. Al final se ofrecerá un compartir fraterno a los presentes.
En esta oportunidad vale la pena citar las frases del Señor Dios, expresadas en Isaías 46,4: “Hasta su vejez yo seré el mismo, y los apoyaré hasta que sus cabellos se pongan blancos. He cargado con ustedes y seguiré haciéndolo”.


































































